11/6/11

muñecos de trapo

Me pilló vulnerable, borracha y con la luna llena.

-¿Qué quieres que echemos un polvo?

-Si.

-Pues dale, ahora o nunca.

Y me llevé a mi cama al chico más joven de toda la fiesta. El niño follaba como quien ha visto más porno que culos en su vida. Frases hechas, gestos copiados, potencia adolescente y melodrama pospolvo.

Cuando los dos terminamos quiso volver a la fiesta sin camiseta y conmigo de la mano, se lo consentí y ahora tengo una manada de niños sedientos cantando serenatas bajo mi ventana.


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